«No hay presupuesto»: La frase que condena a cientos de jóvenes a estudiar bajo techos que amenazan con colapsar
El precio del abandono
En el corazón del Valle del Paranapura, a 15 minutos de la ciudad de Yurimaguas, se encuentra el “Colegio Secundario Variante Agropecuario Munichis”, cuya situación está al borde del colapso.
Panorama en crisis
Las aulas están divididas entre 1er y 5to año de secundaria; muchas de ellas fueron construidas improvisadamente por los padres de familia, con materiales en mal estado, ya que la cantidad de alumnos está en incremento cada año; las paredes de madera se desmoronan, así como las vigas del techo se encuentra en estado de descomposición, muchas de las aulas no cuentan con una culata, y si las disponen, son de costales, estos, no soportan las lluvias de nuestra región, ocasionando que el suelo de tierra de los salones se convierta en barro; formando así un ambiente inapropiado para su formación escolar. Por otro lado, la cancha de fútbol se encuentra en estado caótico, ya que las porterías están oxidadas, las cestas de básquetbol están destruidas, y la maleza crece en medio de plena cancha; al no contar con corrales para el ganado vacuno, estos, se albergan dentro de las aulas y depositan sus desechos fecales. Además de ello, el quiosco donde brindan los alimentos, ni siquiera es un lugar cerrado y completo, ya que solo es una fachada, un muro de madera que separa a los que brindan la comida y a los que la reciben. Finalizando con ello, los padres de familia levantaron un techo provisional con materiales prefabricados que les servirán para sus reuniones.

Fotografía: Osmar Nureña
La respuesta constante: «No hay presupuesto»
«No hay para una secretaria, no hay para un guardián, pero sí hay presupuesto para cambios administrativos cada mes que nada solucionan», declara con frustración el director Luis Capuena Grandez. La Unidad de Gestión Educativa Local de Alto Amazonas (UGELAA), prioriza cambios administrativos internos, por otro lado, los estudiantes escriben sobre sus rodillas en aulas que amenazan con derrumbarse. El director Capuena no solo recibe ese comentario en la UGELAA, sino también por parte de la Municipalidad Provincial de Alto Amazonas, solicitando al alcalde Roy Saldaña una moto furgón para transportar a estudiantes desde comunidades alejadas como Micaela, Trancayacu, Ruiseñor, San Luis, San Rafael y Santa Lucía; al principio esta solicitud fue bien recibida, sin embargo, al hacer seguimiento, el jefe de presupuesto de esa institución, le comentó tajante y cerradamente que: “no hay dinero”.

Fotografía: Osmar Nureña
Un director en búsqueda de soluciones
Para lograr la construcción de este colegio, los dirigentes del frente de defensa de Villa Munichis y el director, por más de tres años vienen haciendo seguimiento a esta petición. En medio de tantas presiones, la Gerencia Sub Regional de Alto Amazonas (GSRAA) mantiene el expediente técnico en «fase de evaluación» hasta el momento.

Fotografía: Osmar Nureña
La voz de la comunidad se alza
«Estamos cansados de promesas vacías. Exigimos la construcción inmediata del colegio. ¡No más excusas!», declara Wilian del Águila Ortiz, presidente del Frente de Defensa de Villa Munichis, quien junto al director Capuena insiste en la urgencia de contar con un expediente técnico en “fase de aprobado”.

Fotografía: Osmar Nureña
El contraste con la capital
Mientras en Lima las autoridades del sector educación como: Morgan Quero, y la presidente Dina Boluarte, celebran un presupuesto educativo de 48 mil millones de soles, que representa el 5.1% del Producto Bruto Interno (PBI) para 2025, en Villa Munichis los estudiantes siguen esperando lo básico: un lugar seguro donde aprender. La ayuda llega a cuentagotas, insuficiente para detener el deterioro de una institución que representa el futuro de cientos de jóvenes amazónicos.

Fotografía: Osmar Nureña
Un llamado a la acción
La crisis del Colegio Variante Agropecuario Munichis no es solo una historia de infraestructura deteriorada; es el reflejo de un sistema que prioriza la burocracia sobre las necesidades reales de los estudiantes. Mientras las autoridades continúan respondiendo con la misma frase desgastada -«no hay presupuesto»-, una generación de jóvenes amazónicos ve cómo su derecho a una educación digna se desmorona junto con las paredes de su escuela.

Fotografía: Osmar Nureña
Redacción: Osmar Nureña y Valeri Apagüeño
🔴 Presentamos en exclusiva un reportaje sobre la dramática situación que viven los estudiantes y la comunidad educativa de este colegio. Hacer clic en https://fb.watch/y8uoG515FP/